lunes, 19 de julio de 2010

En busca de la versión perfecta: Getsemani

Si bien ayer me atreví a decir que las versiones nacionales de "My way" no me habían convencido hoy puedo asegurar que las versiones españolas de "Getsemani" de la conocida película musical llamada como Jesucristo Superstar son mis preferidas.

La versión original no estaba mal, pero no me "llegó" cuando la escuché, creo que no se puede conjuntar en el cásting a un cantante idóneo para el reperterio de la banda sonora y al mismo tiempo a un actor ligeramente parecido a JC. A parte de que la música estaba demasiado baja o la voz demasiado alta. Musicalmente me suena un pelín estancada a la época en la que estaba, en lo referido a esos 70's funkeros, discotequeros:



Pasemos a la versiones que quería comentar. A pesar de que el rostro de pasmo o éxtasi de Camilo, que desde mi punto de vista, le hace perder enteros en credibilidad interpretativa, he de reconocer que cuando escucho su voz, me conmueve:



Y ahora es cuando me tiráis tomates, verduras o botellas de cerveza vacías. Pero para mi, la mejor versión es la de Javier Corcobado, una versión con una música ligeramente diferente, más personal, con una instrumentación más actual, con una voz que no llega a las cotas de Rafael pero que su expresividad le situa por delante. En todo caso, esto sólo es una opinión, pues creo que es la versión más oscura y triste, en vez de épica, que es lo que pide la letra:




Yo quiero decir 
si puedo pedir 
que apartes de mí éste cáliz, 
ya no deseo su amargura, 
ahora quema y yo he cambiado 
y no sé por qué he empezado. 
Yo tenía fe 
cuando comencé 
ahora estoy triste y cansado 
mi camino de tres años 
me parece que son treinta 
¿y qué más puede un hombre hacer?

Si he de morir 
que se cumpla todo lo que tú quieres de mí, 
deja que me odien, que me claven en su cruz.

Yo quiero ver, yo quiero ver, Mi Dios. 
Yo quiero ver, yo quiero ver, Mi Dios. 
Quiero saber, quiero saber, Señor. 
Quiero saber, quiero saber, Señor.

Si he de morir 
dime si es por qué he de ser mejor de lo que fui, 
dime si mi vida con la muerte he de cumplir.

Yo quiero ver, yo quiero ver, Mi Dios. 
Yo quiero ver, yo quiero ver, Mi Dios. 
Quiero saber, quiero saber, Señor. 
Quiero saber, quiero saber, Señor.

Con morir, qué voy a conseguir 
al morir que voy a conseguir, 
quiero saber, quiero saber, Señor 
quiero saber, quiero saber, Señor.

Ah!!! 
¿Por qué he de morir? 
¿Por qué?

Dime por qué quieres que me claven en su cruz, 
muéstrame el motivo, dame un poco de tu luz, 
di que no es inútil tu deseo y moriré, 
me enseñaste el cómo, el cuándo, pero no el por qué.

Ah!!! 
Muy bien, yo moriré, 
pero, pero por favor, 
cuando muera, cuando muera, mírame, 
por favor, mira mi muerte.

Yo tenía fe 
cuando comencé 
ahora estoy triste y cansado 
mis tres años ya son miles 
¿por qué entonces tengo miedo 
de que ya todo termine?

Dios, yo no empecé 
fue tu voluntad 
dame el cáliz de amargura 
clava, azota, rompe, mata 
pero pronto, hazlo pronto, o yo 
me voy a arrepentir.

2 comentarios:

sentimental_mood dijo...

Es que Corcobado es Corcobado...
Le das una canción estilo "Ella ya me olvidó", que fue pasto de discoteca en los 70/80, cantada para ser escuchada sólo por un público femenino en estado vegetativo y Corcobado te dará una nueva versión que pasarás a contestar: "Esta canción es de Corcobado", a cada persona que pregunte por el autor de tal canción.
No es que fuera una gran seguidora de Jesucristo Superstar o en particular de ésta canción, pero al escuchar la versión ganadora(merecidamente tiene ese puesto) sientes un nósequé de esos que sólo la música te hace sentir.

Alexandre Vaudeville dijo...

Corcobado hace lo que hay que hacer, pasar las versiones a su terreno con dignidad. Así y todo yo le quito mérito a "Ella ya me olvidó" o a "Digan lo que digan", por poner unos ejemplos, pues el Sr. Rafael ya las había adaptado con decencia pero sin personalidad "musical"; ese es el mérito de Javier, de ver más allá de una letra y una voz, de visualizar la música como un conjunto y es por eso que de todos los "covers" que ha hecho hasta la fecha es en Getsemani donde llega unas cotas creativas e interpretativas únicas.

En realidad la otra gracia de la canción es que no es un tema de Corcobado sino que es conjunto con los extintos pero increíbles "Manta Ray, en ese Lp tan inspirado llamado "Diminuto cielo".
Manta Ray a modo de mercenarios sacan lo mejor de si a servicio de la canción (como ya hicieron en Score, 1999 magnificando melodias de bandas sonoras populares) y Corcobado los lidera con una voz tan emotiva como pocos veces se le ha escuchado.